1 de septiembre de 2011

BUENOS PROPÓSITOS
























En vez de esperar a primeros de año, creo que es una buena cosa iniciar el nuevo curso como si fuésemos estudiantes.


Tengo tres estados de ánimo, que se van sucediendo. Primero. Asombro: ante el retrato de un energúmeno no identificado (cortesía de la prensa diaria). Segundo: Melancolía: una experta me ha informado de que escribo mal. Debo reconocer que mi vanidad me había hecho pensar lo contrario. Tercero: Tozudez: ya he leido mas de 1200 páginas del Johnson que tristemente me miraba. Y me ha sugerido pensamientos contradictorios. Por un lado he aprendido muchas cosas que desconocía (mi incultura inglesa es enciclopédica). Por otro, si sigo sus consejos mi lectura sería sólo la novela policíaca, puesto que aconseja leer sobre lo que nos gusta: "si leemos sin interés. la mitad del intelecto se emplea en fijar la atención, de modo que sólo queda la otra mitad para atender a lo que se lee". Y finalmente me estoy replanteando dedicar seriamente unas horas, las que pueda a leer todos los dias, a escribir sobre lo que me apetezca y a empezar la historia familiar. Estos son mis buenos propósitos para la rentree.



Bajando a los pucheros, quiero aprender algo de cocina moderna, tengo el inconveniente de que a mi marido no le gusta. Ya veremos.



Y ahora, algunas cosas de Johnson. Gran admirador de EL QUIJOTE; que los ingleses cultos escribían en latín; que su opinión de las mujeres era pésima:" una mujer que se pone a predicar es como un perro que sabe caminar sobre las patas de atrás, no lo hace nada bien, pero sorprende que lo haga". Sobre el lujo "Oirá usted decir, Y esa media guinea gastada en lujos ¿porqué no se la dió a los pobres? !Ay! ¿no ha ido acaso a parar a manos del pobre industrioso a quien mas aconsejable resulta dar que al pobre perezoso? Una traducción de Juvenal: "no es poco ser señor de un pequeño terreno, en el cual al menos un lagarto pueda darse la vuelta". Sobre famoseo : "Señor, es uno de los muchos que se han hecho públicos, aunque sin darse a conocer"; su no muy buena opinión de los escoceses:"los ingleses dan de comer la avena a los caballos, los escoceses se la comen". Está claro, no le gustan los escoceses.

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